Todo indica que la etapa de Dorival Júnior como seleccionador de Brasil está llegando a su fin. Aunque la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) aún no lo ha confirmado de forma oficial, UOL Esporte ha reportado que el despido del técnico ya está decidido. La información fue amplificada este 28 de marzo por el reconocido periodista Fabrizio Romano, quien publicó en sus redes:
En otras palabras, solo falta la firma final. La salida de Dorival se perfila como inminente, en un contexto cargado de presión, malos resultados y un clima enrarecido a pocos meses de las definiciones rumbo al Mundial 2026.
Un ciclo que nunca despegó
Dorival Júnior asumió el mando de la selección brasileña en enero de 2024, con la misión de reconstruir un equipo golpeado tras la salida de Fernando Diniz. Llegaba con credenciales importantes a nivel de clubes —como la Copa Libertadores con Flamengo (2022) y la Copa de Brasil con São Paulo (2023)—, pero su paso por la selección no logró consolidarse.
A lo largo de 16 partidos, el rendimiento fue irregular. Aunque hubo algunos destellos de buen juego, predominaron los tropiezos y la falta de identidad. Su propuesta pragmática nunca terminó de cuajar ni en el vestuario ni entre los aficionados.
El quiebre: Copa América y Eliminatorias en caída
La primera gran señal de alarma fue la eliminación en cuartos de final de la Copa América 2024 ante Uruguay, por penales. A partir de ahí, la relación con la prensa y los hinchas se volvió cada vez más tensa. En las Eliminatorias Sudamericanas, Brasil ocupa un preocupante cuarto lugar con 21 puntos en 14 fechas, lejos del nivel esperado para una selección pentacampeona del mundo.
Empates con equipos inferiores en papel, derrotas sin respuesta táctica ante rivales directos, y un juego deslucido marcaron una campaña decepcionante. La situación terminó por desbordarse tras el 4-1 ante Argentina en el Estadio Monumental, el 25 de marzo. Un resultado lapidario que expuso todas las falencias de su gestión: desorden, falta de reacción y un equipo desdibujado.
Fricciones internas y clima político adverso
A estos factores se suma una relación distante con la dirigencia de la CBF, en particular con su presidente, Ednaldo Rodrigues. Distintos reportes indican que nunca hubo una sintonía real entre ambos, y que la reelección de Rodrigues en marzo de 2025 le dio carta blanca para tomar decisiones que ya estaban gestándose hace semanas.
Según trascendió, el clima interno venía deteriorándose, y tras la derrota con Argentina, ya no quedaban argumentos para sostener el ciclo.
¿Y ahora qué? Los nombres en la mira
Con la salida de Dorival casi consumada, la CBF ya empieza a mover fichas para su reemplazo. El nombre de Carlo Ancelotti vuelve a escena como el gran deseo, aunque su contrato con el Real Madrid hasta 2026 lo convierte en una opción complicada. Otros candidatos que suenan con fuerza son:
- Filipe Luís, actual DT del Flamengo, que representa una apuesta joven y con proyección.
- Jorge Jesus, técnico portugués que ya conoce el fútbol brasileño.
- Abel Ferreira, de Palmeiras, y Fernando Diniz, incluso como regreso, también aparecen como opciones secundarias.
Urgencia y presión: el Mundial no espera
La posible salida de Dorival no solo marca el final de una etapa fallida, sino que lanza a la selección brasileña a un momento de incertidumbre total. Con las próximas fechas de Eliminatorias en junio y el Mundial de Clubes 2025 en el horizonte, el nuevo técnico deberá reconstruir la confianza y recuperar la mística perdida del jogo bonito.
El reloj no se detiene. Y aunque la confirmación oficial aún no llega, todo apunta a que Brasil está a punto de cerrar el capítulo Dorival Júnior, un ciclo que se apagó entre la frustración de los hinchas, los resultados decepcionantes y la sombra de un proyecto que nunca encontró su norte.
